Hijo mío, pareciera que fue ayer cuando te cargué por primera vez en mis brazos, tan pequeñito e indefenso, y ahora es momento de partir a prepararte para ser una mejor persona. Hijo, prometí siempre estar contigo y así será sin importar si estás a 3 km de distancia o del otro lado del mundo.
Ahora hijo, que te aventuras en tu etapa universitaria, quiero compartirte algunos consejos que te ayudarán a lo largo de tu caminar.
Estos consejos hijo, no te evitarán cometer errores, pero si a saber enfrentarlos:
- Elije bien a tus amigos: aquellos que complementen y mejoren tu personalidad, aquellos que estén en las buenas y la malas; hijo, aléjate de aquellas personas negativas que siempre tienen un problema para cada solución, haz equipo con aquellas que sean fuerte donde tú eres débil y viceversa.
- Está pendiente de la gente que te importa: hijo, sabemos que las horas del día parecieran insuficientes cuando de vivir la juventud se trata, pero siempre sobran minutos para saber cómo están las personas que queremos, recuerda las fechas importantes, escríbeles, llámales, que aun cuando no haya nada importante que contar, escucharte los alegrará.
- Mantén un buen comportamiento: hijo, no existen las segundas oportunidades para causar una buena primera impresión, mantén un comportamiento digno; en el camino te encontrarás personas buenas y malas, mantén la cordura con aquello que incluso no la tienen, predica con el ejemplo.
- Con lo pies sobre la tierra: Nunca confundas riqueza con éxito, hijo, el dinero jamás comprará la felicidad, pero con tu bondad y caridad puedes ayudar a otros. No gastes más de lo que tienes, recuerda que estar sin deudas es estar sin peligro.
- Aprovecha cada momento: hijo, tu ya sabes lo que está bien y lo que está mal, los jóvenes de hoy desperdician su tiempo en cosas que no les corresponden hacer por su edad, cometiendo errores en ocasiones irreversibles; enfócate en tus prioridades, que tiempo para divertirse, salir a distraerse un rato sobrará cuando termines tus deberes.
- Sé feliz: así es hijo mío, mi mayor consejo es que disfrutes cada paso que des en la vida, la felicidad no es la meta sino el camino, aprende a apreciar el amanecer de un nuevo día, da gracias siempre por lo que tienes, y mentalízate a ser mejor para ti cada día.
Pero sobre todo, nunca olvides que te amo y que sin importar dónde o cuántos años tengas, siempre serás mi pequeño, el que llevaré toda mi vida junto al corazón.
Atte. Tu padre!
¿Qué otro consejo le darías a tu hijo?
Déjanos tus comentarios en Facebook!